miércoles, 19 de junio de 2013

Tu siempre tienes la razón

               
                 
           "Si crees que eres", es verdad; "si crees que no eres", también es verdad".
Hoy en día todos hemos escuchado esta frase, muchos incluso la hemos compartido en una o varias de las redes sociales; sin embargo, la profundidad del significado no se acaba de entender o no se nos queda en la mente.
La mayoría la leemos, nos gusta, la copiamos o la compartimos, sin siquiera reflexionar en el verdadero significado y de cómo aplicarla a nuestra vida.

Si lo que creo que soy, es verdad y eso soy, ¿por que no comenzar a creer ahora, en este mismo momento y en este mismo lugar, que soy bueno, que soy inmensamente feliz, que estoy lleno de amor por mí mismo y por todos mis hermanos y hermanas? ¿por que no comenzar ya, a creer que confío en mí y que soy merecedor de todo lo bueno?

Si comenzáramos a creer que somos esas personas únicas y maravillosas, y repitiéramos ese pensamiento en cada momento, no necesitaríamos la opinión ni la aprobación de los demás para sentirnos con todo lo anterior. No necesitaríamos demostrar nada a nadie, nuestro ego sería inexistente y siempre seríamos felices.

Saludos y abrazos a todos.

Pedro Silveira.

miércoles, 12 de junio de 2013

jueves, 6 de junio de 2013

Los mensajes negativos

Nuestros inicios
Cuando somos bebés no solo somos perfectos, sino nos sentimos y actuamos de esa manera.
En una situación familiar "normal", a los bebés se les abraza mucho, se les demuestra amor y cariño, se les dice todo el día cuanto los amamos y ellos lo sienten y se regocijan con esto. En resumen, se les refuerza día a día que vinieron al mundo a ser amados.

                                                          El cambio
Cuando dejamos la edad de ser bebés y nos convertimos en niños, más o menos desde los 3 años, el trato hacia nosotros por parte de nuestros padres va modificándose. Es hora de comenzar a educarnos y es cuando comienzan los mensajes negativos que son finalmente con los que aprendemos.
¿Recuerdas alguna de estas? Tu no puedes hacer eso, eres un niño. No puedes estar aquí, esta es conversación de grandes. Eres un tonto por que saliste mal en la escuela, si no estudias no serás nadie, ganar dinero cuesta mucho trabajo, si no comes esto o aquello no vas a ser sano, si no haces la tarea no tienes derecho a salir. 

                                                          La culpa
Es mu fácil culpar a nuestros padres por los fracasos o por haber logrado que no seamos felices, solo que esto de culpar a otros no solo nos hace seguir con el problema, sino que además nos quita el poder de solucionarlo.

El inicio de nuestra sanación se dará cuando los perdonemos, perdonemos todo lo sucedido en nuestro pasado; y esto será más fácil cuando comprendamos que ellos solo hicieron lo mejor que pudieron con lo que sabían y fue basado en la forma que los educaron. Ellos sufrieron lo mismo que nosotros estamos sufriendo. 

Perdonar realmente es quitarte un peso de encima.

Saludos

Un abrazo
Pedro Silveira



miércoles, 5 de junio de 2013

Y tú, ¿te amas a ti mismo?

El problema no es el problema
Si analizáramos a consciencia la forma como nos tratamos, tanto emocional como físicamente, nos daríamos cuenta de cuanta verdad hay en esto de que nosotros mismos nos creamos las enfermedades y las carencias.
Reconozcamos que estamos lejos de ser perfectos y que no tenemos la culpa de qué y de cómo aprendimos en nuestra infancia, pero también hagamos consciencia de que ahora si tenemos la responsabilidad de cambiar nuestra realidad, que ahora está en nuestras manos.

                                 Auto-castigo
De acuerdo a nuestro aprendizaje, vivimos con cargas que nos hacen reaccionar con actitudes dañinas hacia nosotros y siempre tenemos una justificación.
¿Te reconoces en alguna?
Maltrato fisico con cigarro, alcohol, drogas, desveladas, exceso de trabajo, mala alimentación, desorden.
Maltrato emocional con auto regaños, crítica, obligaciones que no nos corresponden, nos creemos indignos de un amor verdadero o de empleos bien pagados, etc.

                                 Amarse a sí mismo
El amor hacia nosotros es la cura para cualquier enfermedad o situación por la que pasemos.
No confundamos el amor a nosotros mismos con vanidad, con ser engreído, o presuntuoso, eso no tiene ningún rasgo de amor hacia nadie, ese comportamiento es de miedo a mostrarse como uno es, es sentirse menos y no querer parecerlo ante los demás.
Amarse a sí mismo es sentirse seguro, pleno, realizado por lo que uno es y como uno es, es desbordar ese amor a toda la humanidad y a todo ser vivo.

                                 El espejo
Es sorprendente como un ejercicio tan simple y sencillo como es pararte frente al espejo, verte directo a los ojos, decir tu nombre y decirte que te amas mucho y que eres una persona maravillosa, pueda decir tanto de cómo te sientes hacia ti mismo.
A un gran número de personas se les hace tan difícil lograrlo y otro tanto ni siquiera lo logra y se justifican diciendo que son tonterías.
Amarse a sí mismo es lo más sublime que podemos hacer y lograrlo, es la manera de ayudar a cambiar al mundo.

Un abrazo.

Pedro Silveira

domingo, 2 de junio de 2013

Nuestra actitud hacia la vida.

Invariablemente la respuesta a la pregunta ¿como te va?  Siempre es un automático muy bien, no importa que tan mal estemos, siempre responderemos de la misma manera.

Por un lado, esto es porque estamos educados a esconder nuestros sentimientos y la situación en la que nos encontramos, principalmente si no marcha bien; y por otro lado, estamos condicionados a sufrir en silencio por lo que creemos y vemos como "normal", y lo justificamos con las expresiones muy conocidas por todos: yo soy así,  así nací, por que así es mi carácter o por que esto es lo que me tocó vivir.
Así fuimos educados y con la costumbre "todo" se nos hace normal y natural.

¿Que tengo?
Cualquier dolencia que tengamos, sea física, de relaciones, económica, de apreciación de la vida, o cualquier otra y que se repite una y otra vez, será solo el exterior de alguna situación del pasado que tenemos atorada en el subconsciente, y que nos está creando un sentimiento de no merecimiento, de miedo, de culpa y se expresa a manera de alguna carencia, que por haber estado con nosotros siempre, la vemos y sentimos como nuestra, que nada podemos hacer al respecto y que de nada sirve ocuparse de ella, solo nos queda sufrirla y tolerarla.

Debería o Podría.
Cada vez que utilices la palabra “debería”, analiza para que la usaste y date cuenta como esta palabra te pone de inmediato con un sentimiento de estar equivocado en algo. Cada vez que la digas pregúntate, ¿Por qué debería?, Cuál es la razón para pensar que “debería” hacer esto.

Has un ejercicio de cambiarla por un “podría”, ya que esta te deja en mejor condición para tomar la decisión sin estar equivocado de antemano. 

El debería es tan dañino que frecuentemente uno se encuentra reprochándose o criticándose por algo que en realidad nunca quiso, o que no fue siquiera su idea; sino que alguien en algún momento nos dijo, “deberías” hacer esto o aquello; y por nuestro sistema de carencias y sentimiento de culpa, y por venir de una persona importante para nosotros en ese momento, lo tomamos como nuestro y sufrimos por no hacerlo.

Es importante darse cuenta, ser consciente del "para qué" de todas nuestras acciones, romper el círculo y no dejarse llevar por la inercia de la "costumbre", que finalmente no es más que la orden del subconsciente a nuestro consciente de qué es lo que se tiene que hacer.

Saludos.

Un abrazo.
Pedro Silveira.

La importancia de ser feliz 2

Nuestros problemas y nuestras experiencias no son más que efectos externos de nuestros pensamientos y estos son solo las ideas que tenemos acerca de nosotros mismos; las ideas se pueden cambiar. Cambias de idea y el sentimiento al respecto se irá.

No hay nadie que no sufra en alguna medida por odiarse a sí mismo, por sentirse culpable de algo, o con el sentimiento de yo no sirvo.
Mientras más fuerte son estos sentimiento más difícil será crearse una vida sana y equilibrada, y una felicidad real y plena.

El miedo, la culpa, el resentimiento y las críticas provocan los principales desarreglos en nuestra vida.
Todo lo que nos sucede en el exterior, es solo consecuencia de lo que nos pasa en el interior y como ya dijimos antes, de esto no se puede culpar a nadie.

El pasado y el perdón
Es en el pasado donde suceden los eventos que nos marcan y nos crean todos los sentimientos que nos afectan en forma tan negativa. Esto no se puede cambiar, pero si se puede cambiar nuestra manera de pensar y nuestra actitud a estos eventos que nos están afectando en el presente.
Hay que renunciar al pasado y perdonar. El perdón nos libera del sentimiento negativo y nos prepara para disfrutar el presente y el futuro.

Si uno se ama y aprueba a si mismo, perdona con el corazón y deja ir, se crea un espacio mental de seguridad, confianza, mérito y aceptación, aumentará su capacidad para amar, creará más relaciones de amor en su vida y un verdadero bienestar y felicidad.

Aquí y ahora es el único lugar y el único momento donde podemos ser realmente felices.
No olvidemos que el poder radica únicamente en el ahora.
Disfrutemos el presente en el lugar y en el momento que nos encontramos. 

Les mando a todos un abrazo con mucho cariño.

Saludos.

Pedro Silveira.


viernes, 31 de mayo de 2013

La importancia de ser feliz

La vida es muy simple. Sanar tu vida solo depende de ti.

Nosotros somos los responsables de las cosas buenas y de las malas que nos suceden.

Lo que pensamos, crea nuestro futuro y lo que pensamos de nosotros mismos, sea bueno o malo se vuelve nuestra realidad. 

El Universo siempre nos apoya y nos otorga lo que le pedimos, seamos conscientes o no de esta petición. Si pedimos amor, armonía y equilibrio, eso es lo que nos otorgará, ahora, si pedimos lo contrario, también nos apoyará y nos lo otorgará.

Debemos aprender a controlar a nuestro inconsciente por que es el que hace los pedidos al Universo. Hay que des-aprender todo lo negativo y re-aprender conceptos nuevos que se basen en el amor.

El Universo no juzga ni critica Se limita a reflejar nuestras creencias acerca de nuestra vida. Aprendemos cuando somos niños de acuerdo a las enseñanzas de los adultos que nos rodean y ellos a su vez aprendieron de los adultos que los rodearon. Aprendimos de personas que no sabían como amarse a sí mismas, entonces, como culparlos de no habernos enseñado a hacerlo.

De adultos recreamos el ambiente en el que crecimos y aprendimos; y también recreamos la relación como la que tenían nuestros padres.
Esto no está bien ni mal, simplemente es lo que conocemos y reconocemos como un hogar y como una relación de pareja.
También nos tratamos a nosotros mismos tal como nos trataban nuestros padres. Nos regañamos y nos castigamos de la misma manera.

No importa lo que se haya aprendido, pensado, dicho o actuado, todo eso ya está en el pasado.
Lo que importa en este momento es lo que decides pensar, hacer y decir ahora, en este momento, eso es lo que te hará sentir feliz en el presente y sentará las bases de lo que tendrás en tu futuro.

El momento de poder es el ahora.

Saludos.

Pedro Silveira.
Trazende